«Nunca se ha conseguido nada sin entusiasmo» Emerson

No hay nada mejor que realizar tu trabajo con ilusión, motivación, alegría. Así lo entiendo yo y así lo he hecho toda mi vida, con entusiasmo. Reconozco que en ese sentido he sido una privilegiada porque he disfrutado de cada minuto que le he dedicado a mi profesión y gracias a ésta me he encontrado a gente que realiza su trabajo con más entusiasmo que yo misma, si eso es posible: el equipo de Plan International.

Plan es una de las organizaciones internacionales más reconocidas en la promoción de los derechos de los niños, con mas de 75 años de experiencia. Su labor en España comenzó para ayudar a los niños y niñas que se habían quedado huérfanos durante la Guerra Civil. Poco a poco fueron creciendo, empezaron a actuar en países en vía de desarrollo y actualmente están presentes en 70 países. Siempre velando por los derechos fundamentales de la infancia.

Empieza la experiencia

Me ofrecieron viajar con ellos a Paraguay para conocer sobre el terreno la labor que hacen. La idea era grabar reportajes que luego se emitirían en varias Galas en 13TV . Vale, visto así podía ser uno de los muchos viajes que por motivos laborales yo he realizado. Pero en cuanto me reuní con ellos y  me hablaron con pasión de los proyectos que íbamos a visitar en la zonas más pobres de Paraguay,  me di cuenta que iba a ser testigo directo de su trabajo, que iba a ser los ojos de los padrinos que siempre se preguntan: ¿donde va mi dinero por apadrinar un niño? y que codo con codo y junto al equipo de Plan en Paraguay iba a conocer de primera mano las comunidades a las que asisten, ¿sabes el tiempo que tardé en decir si? Cero coma.

Poco equipaje, ropa y calzado cómodo, pasaporte y a Barajas para reunirme con mis 3 compañeros de viaje, Sandra y Belén de Plan España y el operador de cámara, Ignacio, compañeros del largo viaje. 11 horas de vuelo hasta Sao Paulo, 3 horas de espera que se convirtieron en 4 porque la tripulación llegó tarde, otro vuelo a Asunción de 2 horas y media que se alargó porque hicimos escala en Ciudad del Este. Total que 22 horas después con los consabidos controles de los aeropuertos, ¡que mira que son pesados! llegábamos a Paraguay. Casi me tiro al suelo para besarlo como hacía el Papa.

Ya nos estaba esperando el equipo de Plan Paraguay. Hubo buen rollo desde el principio. Y esto es fundamental. Sabiendo que íbamos a convivir los próximos días en situaciones no siempre fáciles, trabajando muchas horas y en las zonas más deprimidas la conexión del equipo tiene que ser total.

Tras darnos una charla de seguridad en las oficinas centrales nos ponemos rumbo a San Pedro, nuestro primer destino. Nos sorprende el calor  ya que nos habían dicho «otoño y fresquito» y aunque acababan de pasar varias semanas de lluvias torrenciales, notamos la humedad pero nada de frío, ¡no saben lo que es pasar frío! Ya les dijimos que a Madrid no vinieran en febrero.  Todo iba bien hasta que a mí me «desapareció» el móvil, prefiero utilizar este verbo. ¡¡¡Horror!!!  Sin conexión con mi gente, sin poder «wasapear» ni «tuitear» toda mi experiencia, sin poder hacer fotos. Es en casa y si nos dejamos el móvil al salir  somos capaces de dar la vuelta, vamos yo lo hago, pues a 10.000 Km ¿Te imaginas? ¡Qué impotencia!

Esto no iba a empañar el viaje pero el disgustazo no me lo quitó nadie. Nos fuimos al Hotel con la idea de una ducha y descansar, ya hacía 26 horas que estábamos en danza, y mi sorpresa fue que no había agua caliente. ¿Te he dicho que San Pedro es de las zonas más pobres de Paraguay? Pues eso.

Al día siguiente nuestro primer objetivo fue visitar una Escuela Agropecuaria donde estudian 2 niñas indígenas. Las comunidades indígenas de diferentes etnias viven muy alejadas de las zonas habitadas, los caminos son de tierra por lo que es muy difícil su acceso, sobre todo en época de lluvias, cuando su aislamiento es total. Los facilitadores que trabajan en el proyecto nos cuentan que viven casi como en la prehistoria y  que no se relacionan con nadie.

Por eso con la idea de promover la supervivencia de la niñez y mejorar la alimentación de las familias, consiguieron que dos de las niñas estudiaran en dicha escuela. Un gran triunfo de Plan. De ésta forma no sólo las están preparando en agricultura y ganadería si no que van a ser las «protagonistas» de su comunidad porque van a ser capaces de incrementar las actividades productivas y asegurar el auto abastecimiento familiar. Por no hablar de todo lo que les enseñan de hábitos higiénicos y de prevención de enfermedades.

Por ser niña

Es una de las campañas que crearon para facilitarle la vida a las niñas, #PorSerNiña, seguro que la conoces. Si los niños tienen muchos problemas en tantos países imagínate las niñas, que tienen muchas menos oportunidades en cada una de las etapas de su desarrollo y educación.

«Por ser niña, si nací en una de las regiones más pobres del mundo, seré una de las personas más desfavorecidas de la tierra»

Qué entusiasmo ponen en estas 2 niñas con las que estuve mucho tiempo viendo cómo las enseñan sobre semillas, recolecta, siembra, cuidados de los «chanchos» y demás animales que tenían en la escuela.

Está comprobado que las mujeres son la clave para romper el ciclo de extrema pobreza porque cuando trabajan el 80% de lo que ganan lo reinvierten en la familia. Una niña que termina sus estudios en la escuela aumenta los beneficios de su familia en un 20%. Por lo que fuimos a conocer otro proyecto sólo para mujeres.

Las Bancas Comunales

No te he dicho que otra de las sorpresas de mi viaje fue comprobar que la mayoría de la gente con la que estuve no habla Castellano si no  Guaraní por lo que necesité de un traductor en muchas ocasiones.

Las personas más empobrecidas se encuentran excluidas del sistema financiero. Eso y las grandes distancias desde las zonas rurales a las ciudades con caminos intransitables hicieron que se crearan los microcréditos para mujeres emprendedoras que aumentan la producción de sus huertos, que todo el mundo tiene, y así pueden vender los productos en ferias y mercadillos incrementando los ingresos de su familia. Siempre ayudadas por sus hijas muchas se habían animado a tener animales de los que sacaban mucho provecho para alimentarse.

Ponemos rumbo a Paraguarí recorriendo 200 km en 4 horas y eso que íbamos en 4×4. Los caminos son «andurriales» que hacen muy difícil que salgan de sus comunidades. Los niños recorren kilómetros al día para ir al colegio con los «zapatitos» en la mano para que no se estropeen. ¡Para que luego protesten nuestros niños de ir al cole!. No saben que afortunados son simplemente por haber nacido en España.

 

Esta zona me sorprendió por su vegetación. Podría describir a Paraguay como «verde». Muchos arboles, gran parte de ellos frutales y muchísimas palmeras.

Hicimos una parada en el camino antes de seguir conociendo los programas que llevan en las comunidades con las que trabajan. Fueron 10 minutos, pero esa cascada en una «Reserva Natural» en un día con un calor tremendo nos dio vida para seguir grabando todo lo que veíamos y que era uno de los principales propósitos del viaje…

 El registro de niños

Por los problemas de comunicación que te estoy contando, hay muchos niños que no tienen su «Cédula de identidad», es decir no están registrados por lo que para el Gobierno no existen. ¡Son invisibles!. Secuestran a muchos para el tráfico sexual, para convertirlos en niños de la guerra, para el trabajo infantil,  abusos y demás horrores, pero cuando sus padres van a las autoridades a denunciarlo, al no tener su DNI no pueden hacer nada. Plan consigue que Funcionarios del Gobierno y la Policía Nacional se desplacen a esas comunidades a efectuar el registro de los pequeños. Por lo que además de tener una identidad pueden acceder a la educación, a la sanidad y tienen ayudas del Gobierno.

Mi niña

Grabando estos reportajes me encontré con mi niña: Antonia. Nada más cogerla en brazos se hizo «pipí» en mi camiseta. Te puedes imaginar que no llevaba pañales. Todo el equipo rápidamente decía de cambiármela. ¿Pero el «pipí» de un bebé de tres meses me va a molestar? Yo consideré que era una señal. Que me había elegido. Y entre esto y que fui testigo de cómo la registraban sus padres unas horas después de haberla conocido, decidí amadrinarla.

Cuando eres padrino de un niño no sólo se beneficia él sino su familia y toda la comunidad. ¡Se pueden hacer tantas cosas con tu aportación!

Te dejo un vídeo con una pequeña entrevista que me hicieron en 13tv para hablar del viaje y a continuación una de las Galas que se emitieron para conseguir apadrinamientos y poder registrar a los niños. Como es largo te señalo los tiempos donde aparecen parte de los reportajes que grabé: 13:28, 53:38, 1:17.08, 1:38:12 y 1:53:00

Te sigo contando más cosas que vi y viví. Otro día estuvimos en una escuela donde reúnen a los padres para enseñarles el cuidado de los bebés. Les hablan de nutrición, de higiene, de las vacunas…

Estas citas son muy importantes porque no tienen cerca los Centros de Salud y no dudan en acudir para consultar con los sanitarios sus inquietudes. Plan les regaló una ludoteca para mostrarles que los niños necesitan jugar para desarrollarse. Aplaudo la gran labor de los profesores que ponen todo de su parte para que estas acciones se lleven a cabo en sus instalaciones dada la importancia de las mismas.

Otro proyecto es la «Escuela de fútbol» Mientras los niños están jugando vigilados por los entrenadores no están solos por las calles donde hay muchos peligros.

Y el de «Arpa y guitarras» donde los chavales cargan con los instrumentos atravesando arroyos para no perderse los ensayos. Han conseguido salir de sus comunidades y participar en Festivales de su región porque son muy buenos, y esto les ha hecho estar muy considerados en su entorno.

Y el de «Cuenta cuentos» donde escriben su día a día que de otra manera no se atreven a contar y narran la convivencia con sus padres muchas veces «con la mano muy larga» y escriben la violencia que les rodea.

Y  tantos otros que se realizan con gran entusiasmo por parte de Plan para que los niños tengan un hueco en su comunidad, para que se les reconozca, se les respete y  conozcan sus derechos. Para que sean felices pero sobre todo, para que sean niños.

Una experiencia de viaje maravillosa que me marcó por todo lo que viví y aprendí de gente tan humilde pero tan agradecida. Gente que teniendo tan poco no dudaban en compartir con nosotros sus viandas y zumos. Sobre todo la «Sopa Paraguaya»

La única sopa del mundo «espesa». Os dejo la receta por si tenéis curiosidad. Cuenta la leyenda que surgió por un error. Carlos Antonio Lopez Presidente de Paraguay en el s XIX ante la visita de un embajador extranjero pidió a la cocinera les preparara una sopa. Ésta por los nervios dejó que se consumiera el caldo por lo que quedó como un bizcocho. El embajador preguntó: ¿Esto es sopa? y el Presidente por salir del atolladero dijo: Si, Sopa Paraguaya. Y hasta estos días, que la siguen consumiendo casi a diario. Doy fe.

¿Y tú? ¿Has tenido alguna experiencia parecida? o ¿Colaboras con alguna ONG? Estaré encantada de que me cuentes. Como siempre me encantará leer tus comentarios. Si te ha gustado sería genial que lo compartieras. Miles de gracias.